En esta columna inauguramos una “nueva sección” dentro de las columnas de historia del movimiento obrero: lxs trabajadorxs relatando su propia historia. Para hacerlo nos detenemos en la de Humberto Bracaglioli, el abuelo del historiador Gustavo Contreras. La biografía de Humberto puede considerarse prototípica dentro del movimiento obrero peronista. Criado en la dura realidad rural de lxs arrendatarixs de los años 30, se identificó tempranamente con el peronismo, influenciado por las mejoras para el sector que propició el gobierno en 1944 a través del Instituto Argentino de Promoción del Intercambio (IAPI). En aquella coyuntura, siendo apenas un adolescente, migró a la Capital Federal, donde trabajó cómo cadete en la joyería Ricciardi. A principios de los años cincuenta accedió a su primera vivienda en Ciudad Jardín, Palomar, a través del Plan Eva Perón. Luego de derrocado el gobierno peronista, trabajó como obrero industrial en la fábrica metalúrgica Phillips. Humberto siempre fue un apasionado de la política, y supo transmitir tanto esa pasión como sus conocimientos y sus vivencias mediante anécdotas referidas a su experiencia como trabajador, las que cotidianamente relataba a familiares y amigxs. Esta característica particular, que Humberto comparte con otrxs trabajadorxs, nos muestra cabalmente una de las maneras en las que la clase obrera transmite su propia historia en primera persona. Lo cierto es que muchas veces son los relatos de vivencias personales los que nos cautivan, nos hacen pensar y nos enseñan. En la presente columna rescatamos la importancia estas anécdotas de primera mano que logran acercarnos a la historia y despiertan nuestro interés sobre el pasado, mostrándonos una historia viva, cercana y apasionada.
Columna #21
Fecha de emisión: 1 de junio de 2013.
Canción: “El penado 14” (Agustín Magaldi).
Periodistas: Javier Germinario, Rubén Naveiro y María Stankevicius
El Brote Nº 83, Radio Universidad FM 95.7 Mhz / de la Azotea FM 88.7 Mhz, Mar del Plata